No tiene un rincón en Sevilla. Tiene un triángulo de preferencias que conforman San Lorenzo, San Vicente y Jesús del Gran Poder. En esas latitudes tan intimistas se forjan el niño y el adulto que hoy es Miguel Gallardo. Soleano, andarín del centro histórico, forjador de periodistas, es también un indesmayable emprendedor que ejerce la abogacía, el empresariado y ahora remata faena presidiendo la editorial Sevilla Press. Fue jugador de baloncesto, entrenador nacional, director de comunicación de la Federación Española de Baloncesto en sus años triunfales y directivo. Desconozco cuál fue su mejor partido o su canasta más decisiva. Pero lo que nadie pone en duda es que hoy, tantos años después de su periplo deportivo, la muñeca la tiene engrasada para seguir jugando a ganar. A sus 63 años, tras una vida dedicada a la prensa, abogacía, empresas y al baloncesto, se ha convertido en editor de libros

¿Cómo le dio por «arruinarse» tan literariamente?
No creo tener dinero para arruinarme, pero si fuera editando libros y dando satisfacción a lectores no me importaría.
Usted se asomó al periodismo casi con pantalones cortos, en La Voz del Guadalquivir, dando noticias sobre basket.
Sí. En el año 73 en Radio Deportes con Antonio Gómez, Pepe Nieto y José Antonio Sánchez Araujo, gran amigo, que también empezaba entonces.
Después creó una agencia de noticias cuando en España no había más de tres.
Alfredo Relaño me dijo una vez que si no hubieran existido las agencias de noticias las habría inventado yo. Yo creé la mía sin conocer ninguna de estas, tenía 17 años.
Aquella agencia de noticias, «Andalucía Deportiva», fue para muchos una auténtica escuela de periodismo. Y muchas de las firmas que se forjaron siguen en plena actividad.
Por allí pasaron más de 300 periodistas, con diversas suertes en sus futuros respectivos. Muchos de ellos siguen en activo.
También tuvo profesionales en la prensa del corazón a través de la agencia «Nuevo Día». ¿Cómo consiguió su agencia la exclusiva de la boda secreta del padre de Felipe González
Entré en Europa Press por Antonio Herrero, compañero de milicia universitaria. Felipe González se enteró de que su padre se había casado por segunda vez por el reportaje.
¿Qué opinión tiene sobre esa prensa del corazón que entiende que a más basura más negocio?
Sólo entiendo de la prensa de corazón que sigue teniendo corazón. La otra podemos clasificarla como negocio simplemente y no me interesa nada.
Hablando del corazón resulta imposible olvidar el libro dedicado a Rocío Jurado que ha publicado en Sevilla Press Marina Bernal.
«Canta, Rocío, canta», es el perfil humano de una estrella. Coincidió con el décimo tercer aniversario de su muerte. Tuvo una gran repercusión mediática en televisiones, radios y prensa nacional.
En ese libro se cuentan muchas cosas de Rocío. ¿A usted cuál le conmovió más?
Lo más conmovedor fue rescatar la imagen de Rocío Jurado como artista, sin ninguna polémica en torno a ella, dar a conocer el gran ser humano que fue, y saber el gran número de seguidores que todavía tiene por todo el mundo.
Entiendo que no habrá tenido problema alguno para ilustrar ese libro con material gráfico exclusivo…
Escogimos las 200 mejores fotos inéditas tras visionar más de 5.000, no sólo del archivo gráfico de Sevilla Press, también colaboraron muchos chipioneros y admiradores de Rocío de la Asociación «La Más Grande».
Dicen que usted tiene el archivo gráfico en color mayor de Andalucía. ¿Exageran o es cierto?
Podría ser cierto. Llevamos trabajando en color para las revistas desde el año 76, y la prensa se incorporó al color más tarde. Tenemos clasificadas más de 100.000 imágenes. Me gustaría cederlas a la Fototeca municipal.
¿Si tuviera que elegir una de esas fotos para dibujar el mundo del espectáculo de las últimas décadas en Andalucía cuál sería?
Isabel Pantoja de luto delante de la tumba provisional de Paquirri; la boda de Rocío Jurado y Ortega Cano en Yerbabuena; o el baile de la Duquesa de Alba en la Puerta de Dueñas en su tercera boda con Alfonso Díez…
Me acuerdo de Alfredo Sánchez y del libro sobre la Pantoja que también ha publicado su editorial. ¿Por qué se tituló «Superviviente Pantoja»?
Es una superviviente de su propia vida. Huérfana de padre a los 17 años, viuda a los 28 con un hijo de 8 meses, su paso por prisión, y siempre se sobrepone a la adversidad. Si alguien quiere morbo o busca una crónica de sucesos o tribunales en el libro se equivoca.
Sevilla Press acaba de reeditar, tras treinta años, el «Cómo llora Sevilla» del padre Cué. ¿Eso lo hace por olfato editorial, por soleano o porque ese libro aún tiene absoluta vigencia en la Sevilla cofradiera?
Llevaba 30 años sin editarse y no quería que se perdiera, que la gente joven lo conociera. Agradezco enormemente a la Compañía de Jesús que me haya cedido los derechos. Ha sido el libro más leído en toda la historia de la Semana Santa de Sevilla, queríamos unir los mejores textos con las mejores fotos y técnicas de impresión que tenemos ahora y no existían hace 30 años.
Triángulo
No tiene un rincón en Sevilla. Tiene un triángulo de preferencias que conforman San Lorenzo, San Vicente y Jesús del Gran Poder. En esas latitudes tan intimistas se forjan el niño y el adulto que hoy es Miguel Gallardo. Soleano, andarín del centro histórico, forjador de periodistas, es también un indesmayable emprendedor que ejerce la abogacía, el empresariado y ahora remata faena presidiendo la editorial Sevilla Press. Fue jugador de baloncesto, entrenador nacional, director de comunicación de la Federación Española de Baloncesto en sus años triunfales y directivo. Desconozco cuál fue su mejor partido o su canasta más decisiva. Pero lo que nadie pone en duda es que hoy, tantos años después de su periplo deportivo, la muñeca la tiene engrasada para seguir jugando a ganar.

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