
Rocío Jurado descansa por fin junto a las personas que más añoraba y que siempre fueron su referencia en la vida, sus padres, Fernando Mohedano Crespo y Rosario Jurado Bernal.
Ambos ocupaban la misma sepultura en el cementario de San José de Chipiona pero por expreso deseo de los hermanos de Rocío fueron trasldados hasta la sepultura de Rocío y el mismo día que ella recibió sepultura lo hizo con los restos de sus padres. Volvía así Rocío a estar junto a las dos personas que más marcaron su vida y a las que continuamente hacia referencia.
Rosario fue además su consejera y principal apoyo en sus comienzos, pasaron juntas por muchas situaciones y por eso cuando fallece con sólo 51 años la cantante atravesó uno de los peores momentos de su vida.A su madre le dedicó una canción: Algo se me fue contigo madre, pero tuvo que dejar de cantarla durante un tiempo debido a los recuerdos tan emotivos que le evocaba
A su padre tuvo menos oportunidad de conocerlo ya que falleció cuando sólo tenía doce años, siendo ella la mayor de tres hermanos y teniendo que asumir el papel de sacar adelante a la familia
La propia Rocío recordaba así a sus padres:
- Yo nací en el seno de una familia muy unida. Fernando Mohedano, mi padre era guapísimo, y mi madre, Rosario Jurado que era bellísima, formaban una pareja maravillosa. Era una familia que se adoraba, no solamente mis padres, sino toda la familia,siempre hemos estado muy unidos. Una familia maravillosa que nada más que me dieron buenos ejemplos a lo largo de toda mi infancia, y a lo largo de mi vida, también después. Esa influencia la noto muchas veces
Rocío comienza en el mundo artístico primero participando en diversos concursos radiofónicos, pero sólo después de que su padre muriera ya que este siempre se opuso a que se dedicara al mundo de la canción. Ella recordaba así sus comienzos:
- Salí primero como concursante, cuando ya murió mi padre. Mi padre murió cuando yo tenía doce años, empecé a trabajar en la zapatería de mi padre, después de modista con mi tía Concha, una hermana de mi abuelo, a la que yo llamaba tía
Sin embargo el mundo artístico sigue siendo en aquellos años la meta de la chipionera y;
- Lo mío era cantar y vine a varios concursos a Sevilla movida por la ilusión que tenía mi tío Antonio, hermano de mi madre de oirme algún día cantar en la radio. Yo siempre había cantado, y el único que me alentaba de toda la familia era él, mi padre decía que antes muerto que tener una hija artista, y lo que es la vida, murió él y yo no tuve más remedio que dedicarme a cantar para sacar adelante a mi familia

