
Durante tres décadas, los 40, 50 y 60, Carmen Sevilla fue la más brillante estrella que iluminó la España en blanco y negro de la Dictadura: cantante, bailarina y actriz –llegó a rodar hasta 70 películas–, pudo triunfar en Hollywood pero prefirió declinar el contrato que le ofrecía uno de los grandes estudios. Era muy jovencita entonces, se trataba de otros tiempos y en España tenía cuanto necesitaba para ser feliz. Todo ello lo recoge la biografía Carmen Sevilla, la novia de España, de Alfredo Sánchez. Comenzó a los 14 años en la emisora La Voz del Guadalquivir y, a punto de cumplir los 65, no ha dejado de trabajar ni un solo día. Así, varias editoriales han ofrecido a Alfredo Sánchez escribir sus memorias: cada año, es ley de vida, son menos los periodistas que pueden contar su propia experiencia junto a personajes eternos. El inabarcable archivo fotográfico en color de la agencia Sevillapress es el más rico a nivel privado de Andalucía. La suma de ambas ventajas, llevó a Alfredo a escribir las biografías de Francisco Rivera ‘Paquirri’, Isabel Pantoja y Jesulín de Ubrique mientras que su compañera Marina Bernal firma las de Rocío Jurado, Lola Flores y Raphael. Siempre, nombres propios de categoría inmortal, muy lejos de los famosos fungibles que se imponen hoy en las revistas del corazón.

