El cambio climático es uno de los grandes retos del planeta y materias fundamentales en la lucha son el transporte público, la eficiencia energética y la reducción de los residuos y la valorización de los mismos, a través de un modelo de economía circular y verde.
La ciudad de Sevilla se sumó al Pacto de Alcaldes de París en la lucha contra el cambio climático, asumiendo una serie de compromisos internacionales sobre la base de que las ciudades son las principales causantes del cambio climático y, por tanto, como epicentros del problema deben ser también el epicentro de la solución.
En este marco, el actual equipo de gobierno de la ciudad, avalado por múltiples acuerdos del Pleno del Ayuntamiento de Sevilla en materia de medio ambiente y lucha contra el cambio climático, tiene un firme compromiso para propiciar una movilidad urbana sostenible que pasa inequívocamente por la intermodalidad, el transporte público, la bicicleta, los itinerarios a pie y los vehículos eléctricos e híbridos.
En suma, caminar hacia una movilidad urbana que permita una sustancial reducción en el uso de los tradicionales combustibles fósiles y, por tanto, una gran contribución al medio ambiente y a la lucha contra el cambio climático. Pero, además, no es sólo medio ambiente, sino es también contribuir a la salud de las personas.
El Pacto de Alcaldes de París, la Declaración de Sevilla por la Economía Circular o los acuerdos del I Foro Global de Gobiernos Locales sustentan también el proyecto de ampliación del Metrocento entre San Bernardo y Santa Justa.