Cuerpo técnico y jugadoras se subieron al bus nada más concluir el partido ante Mali y se desplazaron hasta Mutianyu, uno de los tramos más vistosos de la monumental construcción situado a 70 kilómetros de la capital pekinesa. España ya aguarda los cuartos de final de la cita olímpica.
Las chicas tuvieron más suerte que sus compañeros del equipo masculino. Si hace tres días el mal tiempo y la persistente lluvia impidieron a los jugadores alcanzar la Gran Muralla cuando se encontraban a escasos 200 metros de la maravilla, la selección femenina coronó el colosal monumento y tuvo la ocasión de pasear por uno de los tramos más conocidos dada su cercanía a Pekín.
Mutianyu, lugar de parada y visita del equipo que entrena Evaristo Pérez, es un espectacular emplazamiento montañoso al cual se accede desde uno de los teleféricos que facilitan la subida a la construcción de defensa. Hasta allí se desplazaron las jugadoras con las únicas excepciones de las tocadas Nuria Martínez, Cindy Lima, Laura Nicholls y Luci Pascua, que tomaron viaje de regreso a la Villa Olímpica- y el cuerpo técnico de la selección femenina a la finalización del partido ante Mali, encuentro que cerraba la primera fase del torneo olímpico femenino y que se saldó con la tercera victoria del equipo español en la cita pequinesa.
España coincidió con los turistas Wade, Paul y Williams
La selección femenina se topó durante el paseo dominical por la Gran Muralla con muchos deportistas olímpicos de diferentes nacionalidades que también aprovecharon las horas de descanso para conocer una de las siete maravillas del mundo. Nuestras internacionales pudieron charlar con tres componentes del equipo masculino de Estados Unidos que hoy disfrutaban de día libre tras la victoria ante el combinado español. Dwyane Wade, Chris Paul y Deron Williams, acompañados por familiares y amigos, se mezclaban entre los turistas que recorrían tan espectacular emplazamiento defensivo.
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