La windsurfista sevillana Blanca Manchón (Nike / EMASESA / EnerZona / Training for Gold/ Blondy wetsuits) ha ocupado la octava posición final en el Campeonato de Europa de la clase RS:X, que este sábado ha concluido en la localidad turca de Cesme. La que fuera campeona continental en 2006, subcampeona en 2004 y 2009, además de bronce en 2007 y 2013, se ha despedido de la competición con el décimo puesto en la Medal Race, lo que le ha hecho perder una plaza en la general.
A diferencia de lo ocurrido en la penúltima jornada, la fuerza del viento, que soplaba de 25 a 30 nudos, no ha sido obstáculo para que pudiera completarse el programa previsto para el cierre de la cita otomana. A pesar de todo, la regatista del Club Náutico Sevilla arriesgaba en la salida dispuesta a apurar sus opciones de metal, intento que fue abortado por una caída masiva de la flota debido a una racha de viento que la situaba en los puestos traseros de la prueba final, reservada a las diez primeras clasificadas, de valor doble y no descartable.
Ya con la mente puesta en el Campeonato del Mundo del próximo mes de septiembre en Santander, la sevillana se tenía que conformar con completar el recorrido. Con los 20 puntos acumulados, Blanca se despide del Europeo con un total de 78, los mismos que la finesa Tuuli Petaja, subcampeona en los Juegos de Londres, séptima en la Medal.
Por arriba, la lucha por el oro se decantaba favor de la gala Charline Picon, que tras ganar la manga final renueva la corona lograda el pasado año en su país con un total de 27 puntos. Tras ella, la también sevillana Marina Alabáu se colgaba la plata tras ser octava este sábado y sumar 49 puntos, por los 52 de la polaca Zofia Nocetti-Klepacka, bronce.
Blanca Manchón: "Salí a arriesgar para explotar esa mínima opción de medalla y casi me sale bien. Pero me quedé un poco corta en la primera ceñida y luego una racha de viento de 30 nudos nos tiró a casi todas, con la mala suerte de que la israelí me cayó encima. A partir de ahí me dediqué a terminar la manga y punto, porque tardé mucho en ponerme en marcha y encima se me rompió un sable de la vela.
La moneda ha salido cruz esta vez. Llegaba bien preparada, pero no me salido mi campeonato. La verdad es que he competido muy mal desde el principio. No ha sido mi mejor semana. Ahora, a preparar bien el Mundial y corregir errores. En dos meses la historia será diferente. Voy por el buen camino y esto sólo ha sido un tropezón".
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